¿Cuál es el problema?

La oxidación es un fenómeno natural que provoca el deterioro de alimentos, cosméticos, lubricantes y otros productos de uso cotidiano. Como resultado de esto, los mismos se deterioran y terminan en la basura. Los antioxidantes juegan un papel clave al frenar este proceso y extender la vida útil de los productos. A pesar de que existen cerca de 60.000 antioxidantes, las soluciones comerciales actuales son limitadas en cuanto a eficacia, costo y seguridad, además de no satisfacer la creciente demanda de opciones más naturales y sostenibles. El principal desafío radica en la falta de conocimiento sobre cómo combinar los antioxidantes individuales para lograr efectos sinérgicos. Hasta el momento, para desarrollar estas formulaciones se realiza el método de “prueba y error” en laboratorio, el cual es un proceso ineficiente y que lleva años de investigación y recursos.