¿Cuál es el problema?

A medida que los consumidores se preocupan más por su salud y buscan opciones alimentarias sostenibles, se ha ido comercializando con éxito en todo el mundo un nuevo grupo de productos lácteos a base de plantas. Sin embargo, estos productos siguen sin imitar las propiedades funcionales y nutricionales de los productos lácteos convencionales. Las empresas de productos lácteos de origen vegetal suelen tener dificultades para crear con éxito productos alternativos de valor añadido, como quesos y helados. Este es el mayor reto al que se enfrenta hoy la industria para satisfacer la demanda de un número creciente de consumidores ávidos de este tipo de productos.